Toda buena historia comienza con un ashoo
Y termina con un miaw
 
Bailey
Todo era perfecto; tenía un trabajo de ensueño, un jefe que parecía sacado de las portadas de revista y una vida relajada. Entonces descubrí que… ni se trataba del trabajo que esperaba, mi jefe era la mismísima encarnación de un demonio y mi vida se volvió una serie de eventos desafortunados. ¿Mi consuelo? Ese hermoso gato que apareció en la puerta de mi casa justo cuando estaba por aventar todo por la borda.

Callum
Todos decían que levantar mi propia empresa y figurar entre los diez hombres más importantes del país antes de cumplir los treinta era algo imposible, pero lo conseguí. Me encontraba en la cima del mundo financiero, estaba dispuesto a conquistar el mundo, cuando aquel fatídico accidente ocurrió, haciendo que toda mi vida cambiara en un instante, ¿y todo por qué? Por aquel gato que se atravesó en mi camino.