Nunca olvidamos a quien nos lastima.
Así como tampoco olvidamos a quien nos traiciona.
Pero, sobre todo, jamás olvidamos a quien nos ama.

Cerys
La vida es impredecible... esa era mi excusa para hacer lo que quisiera sin importarme las consecuencias, podía permitírmelo ya que contaba con un apellido y una cuenta bancaria que me respaldaban. Siempre viviendo al límite, siempre determinada a cumplir mis caprichos, siempre pensando únicamente en mí. Hasta que lo conocí y me hizo abrir los ojos ante una realidad que me negaba a aceptar.

Conor
La vida es impredecible... algo que aprendí de la peor manera. Por un instante me creí el rey del mundo, capaz de conseguir cualquier cosa, y al siguiente ya no tenía nada, nada salvo un sentimiento que con cada inhalación crece más y más clamando venganza. Una venganza incapaz de apaciguarse con nada, salvo la muerte de quien me arrebató todo lo que amaba.

Cuando dos cuerpos vacíos colisionan, sus almas fragmentadas se liberan.